De Sevilla a Madrid: la emoción del Barroco en la escultura

La escultura barroca sevillana nació para conmover. Entre cofradías y talleres, la madera policromada se convirtió en cuerpo vivo gracias a técnicas de encarnación, estofado y postizos que intensifican la empatía. Esa poética del gesto y la mirada viaja hoy a Madrid en forma de referencias, restauraciones, colecciones y lecturas contemporáneas que activamos desde la galería de arte en Madrid Galería Eliche.

Oficio y emoción: claves de un lenguaje

  • Encarnación: veladuras de óleo sobre preparación que reproducen epidermis, venas y rubores; el espectador siente la cercanía de la carne.

  • Estofado: pan de oro bajo capas de color que se raspan para simular tejidos suntuosos, pliegues y brillos procesionales.

  • Teatralidad: composiciones helicoidales, paños al viento y diagonales que proyectan la escena hacia el público, núcleo de la emoción barroca en Madrid y Sevilla.

Dos escultores, dos tonos del Barroco

  • Juan Martínez Montañés (1568–1649): canon de serenidad y medida clásica. Su tratamiento del rostro —cejas suavemente arqueadas, labios entreabiertos— busca conmover sin exceso. Montañés fija la gramática del realismo devocional que inspirará a generaciones.

  • Luisa Roldán, "La Roldana" (1652–1706): formada en Sevilla y activa en Madrid como escultora de cámara, introduce una dulzura vibrante: pliegues dinámicos, expresividad contenida y terracotas policromadas que acercan lo sagrado a lo doméstico. Su obra articula el puente Sevilla–Madrid desde el corazón de la corte.

Obra emblemática: Cristo de la Clemencia (c. 1603–1605), Juan Martínez Montañés

Fuente: patrimoniodesevilla.es
Fuente: patrimoniodesevilla.es

Modelo de equilibrio y patetismo contenido, este Cristo de cuatro clavos concentra la emoción barroca sin grandilocuencia: anatomía rigurosa, cabeza vencida con serenidad y un diálogo sutil entre encarnación y luz. La obra se ha convertido en referencia para la imaginería posterior y permite explicar por qué la escuela sevillana marcó un estándar técnico y espiritual que hoy dialoga con propuestas de la exposición de arte en Madrid.

Eliche: mirar el Barroco desde el presente

En Galería Eliche proponemos reactivar este legado con artistas que trabajan madera, dorado, resinas y pigmentos minerales, ensayando una teatralidad contemporánea. Mediaciones, textos de sala y encuentros con creadores permiten entender cómo la herencia sevillana sigue latiendo en el tejido cultural madrileño. Si buscas Barroco en Madrid, aquí encontrarás un espacio para sentir y pensar la materia.

Visítanos

Te invitamos a descubrir estos diálogos en la Galería Eliche, galería de arte en Madrid en el barrio de Las Letras. Agenda una visita guiada o contáctanos para diseñar un recorrido a medida: de Sevilla a Madrid, la emoción del Barroco sigue viva en cada pliegue y cada mirada.